El ukemi que yo hago lo aprendí de un compañero granadino afincado en Bélgica, Rafa. Me dio la idea de un ukemi suave y agradable, sin golpear el suelo. Del maestro Tissier apliqué la idea de usar el ukemi como una forma de desplazamiento. Y del maestro Frank Noël el posicionamiento y el giro y dirección del cuerpo al realizar ukemi cuando se trabaja con un compañero.
De todo esto surgió mi forma de hacer ukemi, algo diferente a todo, con sus adeptos y sus detractores, pero mi forma al fin y al cabo.
